Ibis Styles Budapest Center ★★★

El baño muy antiguo,

El desayuno La ubicación

Pagamos una habitación para 3 personas pero fue con sofacama, no estuvo mal pero esperaba una cama.

La ubicación

Faltaba una mini nevera

Nos gustó muchísimo y volveríamos a alojarnos! Las habitaciones estaban muy limpias, eran silenciosas, tenían aire acondicionado, buenas cortinas para oscurecer. El desayuno era espectacular, generoso en cantidad y calidad. La atención del personal es excelente, todos colaborando con sonrisa y solucionando todas las dudas! Súper recomendable!

Nos gustó mucho todo! Lo único que podría mencionar es que la habitación doble (tuvimos dos habitaciones) era muy muy pequeña y era difícil circular y moverse con el equipaje... pero era un detalle....

Muy bien la ubicación por estar cerca a lo sitios por conocer en la ciudad y así mismo a los medio de transporte. El diseño de todo el hotel muy especial

Debe igualar o mejorar el desayuno de cualquier Ibis, el personal está pendiente más de recoger la loza que garantizar el sumistro continuo de alimentes. Extraño que esto suceda en un Ibis

bien ubicado, cerca para ir caminando a los comercios del barrio judío y en metro a lo turístico de la ciudad. lo mejor del hotel es la insonorización de las habitaciones.

el hotel es un poco feo para ser una cadena. El personal del lobby no es amable, en especial un hombre joven de aretes blancos grandes que esta en las noches.

buen desayuno y buena ubicación cerca de la estación de tren para continuar el viaje.

la habitación era bastante pequeña y el hotel estaba un pelin descuidado

una buena ubicación, la habitación estaba grande y cómoda.

el desayuno es repetitivo

Habitación limpia, agradable y con lo necesario para descansar bien. El desayuno es abundante y variado. El hotel está a pocos metros de una estación de metro, y a la vez cerca para ir andando a comercios y restaurantes.

El aire acondicionado solo tiraba aire caliente, parecía ya estaba programado, y aunque es diciembre se ponía un poco caliente dentro de la habitación , entonces no había forma de refrescar el ambiente.

La ubicación, especialmente con respecto al barrio judío y las paradas del transporte público, tanto tranvía como metro.

La habitación no estaba bien aislada del sonido y tuvimos problemas para conciliar el sueño en ocasiones. El trato de los recepcionistas dejaba que desear, más que poca educación, desidia y poca amabilidad.

La habita es silenciosa y se puede descansar bien. La conexión de internet es estable. El desayuno bastante completa y con variadas opciones.

Las habitaciones son muy pequeñas, la ducha es un poco incómoda.

La máquina de los gofres y la decoración.

La habitación que nos tocó era muy pequeña.

La cama comodísima.

Se salía el agua de la ducha.

Es un hotel sencillo, cómodo y bastante nuevo. Nos gustó que no se oyera apenas ningún ruido. El desayuno es más que suficiente. Eso sí, el café es francamente mejorable. En cuanto a la ubicación, no nos planteó ningún problema. Se puede ir andando a muchos lugares (para los amantes de la música, está muy cerca del teatro Erkel, por ejemplo, o de la Academia Listz). A dos pasos está la parada del metro, el tranvía... Y en apenas veinte minutos puedes llegar a la famosa Vaci utca...

Aunque el personal es amable y eficiente, su desempeño es siempre en inglés. No todo el mundo habla un buen inglés y sería deseable una mayor consideración para hacerse entender con quienes no lo utilizan regularmente.

El decorado es muy bonito para los amantes de los videojuegos como yo, El desayuno bufet esta todo muy rico y fresco. La cama muy cómoda. El café gratuito en recepción . La limpieza

Por poner alguna pega la almohada muy bajita para mi gusto Y al cambiar las toallas solo nos dejaron una y de las pequeñas.

La ubicacion y la relacion calidad-precio. Muy buen desayuno

El personal bastante seco y borde

Muy comodo

El desayuno

El hotel es cómodo, limpio y tranquilo. La insonorización de las habitaciones es bastante buena, lo que permite descansar. La ubicación del hotel es muy buena y es posible llegar caminando tanto a la estación Keleti como hasta el Danubio. Si se prefiere usar el metro, la estación Blaha Lujza tér está prácticamente al lado del hotel. El desayuno es muy variado y el horario es amplio. No tienen leche de soja o aceite de oliva, pero hay otros muchos productos como fruta fresca, bollería, zumos, buen café, huevos, embutidos y un largo etcétera. Incluso cuentan con una máquina para hacer gofres en el momento. La decoración del hotel es muy divertida, tal como se muestra en las fotos. La habitación es amplia y las camas cómodas. El baño cuenta con una ducha grande. Al lado de recepción hay una cafetera y agua disponibles de forma gratuita las 24 horas para cualquier cliente. La atención en recepción es muy buena y están muy predispuestos a ayudar y a hacerse entender. El día que hicimos el check out nos permitieron dejar las maletas en recepción, lo que es de agradecer.

Limpieza y atención del personal

Habitación pequeña, sin apenas sitio para las maletas

Muy buen desayuno y calidad de las habitaciones. Personal amable